En mi opinión, nuestro torneo local no esta bien distribuido en cuanto a las fechas de competencias.
Cuando empieza el campeonato, se emplea el sistema de jugar el 1° frente al recién ascendido, el 2° ante el penúltimo y así sucesivamente.
Esto produce que el público peruano (que sabe bastante de voleibol), no asista a las primeras fechas con el consiguiente perjuicio económico para todos los actores de esta competencia.
Deberíamos sembrar los partidos importantes en fechas intercaladas. Hay equipos que ya están proyectados para ser finalistas y son los más atractivos de este torneo.
Un partido fuerte de fondo y uno de los equipos chicos de preliminar ayudaría al espectáculo y a la taquilla.
Ya para la etapa final puede ser coherente el sistema de 1° vs 8°; 2° vs 7°; etc.
Soy de la idea de organizar un campeonato dividido en dos partes bien diferenciadas. En la primera debe priorizarse el equilibrio de interés del público, distribuyéndose las fechas interesantes y además, premiando el trabajo de los equipos que contribuyen al voleibol y forman atletas en divisiones menores.
Esto se puede lograr a través de estímulos de puntaje adicional para sus equipos de mayores.
¿Se imaginan que cada equipo que gane su categoría aporte puntos a su primer equipo para la etapa inicial de competencia?
Dos puntos al campeón juvenil y uno al segundo, y lo mismo en menores.
Esto significaría que un equipo formador podría llegar hasta con cuatro puntos de bonificación a la primera etapa del torneo de mayores.
En la segunda etapa, los resultados serán los que cada uno obtenga, pero ya en este tramo, los partidos serán interesantes por si mismos.
La televisión vende, difunde, pero corresponde a quienes deciden, tomar medidas que contribuyan a desarrollar nuestro futuro.
El público ya ha demostrado que las distancias no son grandes cuando se trata de ver un buen espectáculo.
Es tarea de la FPV mejorar lo que ya se ha logrado.